Un menor con capacidades diferentes, sufrío un principio de ahorcamiento, hecho que comenzó a investigar la Oficina de DH y policía local.
Transcurría las 21,30 cuando nos drigíamos a nuestro domicilio; momento en el cual una vecina de la ciudad, nos muestra el estado en que se encontraba un menor de edad con capacidades diferentes en un estado preocupante.
Ante esto, tomamos contacto con la encargada de Derechos Humanos para que actúe al respecto, la cuál se hizo cargo al concurrir a la seccional 42 y dar a conocer el hecho. En tanto el menor continuaba en el domicilio de la vecina solidaria, quien le ofreció comida y lo resguardó. Mientras se esperaba la presencia policial y la del médico, la víctima no podía tragar comenzando a llorar por lo que estaba viviendo.
De acuerdo al relato poco entendible, el hecho habría ocurrido un día atrás en un lagar de la ciudad, por un mayor de edad en estado de ebriedad. El menor habría concurrido a la policía a dar muestra de las lesiones, pero nadie hasta el momento había tomado carta en el asunto.
Alrededor de las 23, al ver que el personal policial no concurría a buscar al menor, la vecina del barrio Barracas, solicitó nuestra movilidad para acercarse a la dependencia y de esa manera se pudo llevar al menor en el móvil policial a ser revisado por el médico policial.
De acuerdo a personal policial, la Jueza de Turno de la ciudad de Añatuya, ya tendría conocimiento del hecho.
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